Los dos primeros grupos fueron "Laura López Castro y Don Philippe" -una música preciosa tocada en un lugar lamentablemente demasiado grande y frío porque es una de esas músicas que te gustaría que te susurraran al oído al calor de un cubata" y la gran revelación de la noche: una chica llamada Soha. Copio-pego lo que he encontrado por allí por si os animáis:
Soha es una joven cantante nacida en Marsella que acaba de editar su primer CD en el mercado francés titulado D'ici & D'ailleur -De aquí y de otra parte-. Su origen es saharaui, sus padres se trasladaron desde los campos de refugiados de Argelia hasta la ciudad francesa donde criaron una familia numerosa de ocho hermanos en donde ella es la benjamina. En las entrevistas y biografías insiste en proclamar la fundamental influencia de su madre que le trasmitió el amor a la música.
El resultado es una fusión de estilos, imágenes, olores y gustos variados que te trasportan desde el reggae jamaicano, bajo la influencias de los maestros Bob Marley o Dennis Brown, pasando por el jazz, Cuba o Cabo Verde. Música tropical y europea a la vez. El optimismo, la melancolía e incluso la esperanza son los estados de ánimo que sobrevuelan todos los temas. El francés, el español o el inglés son los vehículos lingüísticos empleados por una voz excepcional perfectamente controlada y que sabe matizar como nadie.
Soha es el reflejo de un bello mestizaje tanto artístico como étnico.
Pero lo bueno estaba por llegar. Después del concierto, fuimos al Badeschiff (que está al ladito). El Badeschiff, como su propio nombre indica, es un barco de baño. Más concrertamente se trata de un antiguo carguero acondicionado como piscina y lo más curioso es que se encuentra en medio del río. Además los martes se puede entrar gratias a partir de las 9 de la noche. Nosotros ya fuimos preparados al concierto así que sólo tuvimos que ponernos el bañador, pasar por la ducha y al agua patos! A las 12 de la noche, en medio del río Spree. Adjunto un par de fotillos del lugar.
Por cierto, el domingo hicimos una paella riquísima en una barbacoa en el balcón de nuestra casita. Luego bajamos al patio a comérnosla con unas cevecitas. Adjunto también foto de la obra de arte. Se admiten pedidos.